Descubre cómo el té rooibos ayuda a la salud de tu hígado
El té rooibos es una bebida que se extrae de la infusión de hojas de un arbusto que crece en la costa Sudafricana llamado Aspalathus Linearis. El arbusto donde se consigue esta infusión, es alto, de ramas elásticas y con hojas en tono verde claro. Por ello, el té roiboos es una infusión muy popular debido a las grandes propiedades que posee. Una de estas propiedades se traduce en que el té rooibos es bueno para el hígado y además permite desintoxicar el cuerpo.
El origen del té rooibos se traslada al área de la península del Cabo. Se cosecha entre los meses de enero y marzo, eligiendo ejemplares de más de 18 o 24 meses de edad. Se recolectan las ramas que tienen las hojas más jóvenes, las cuales son troceadas y puestas a secar. El siguiente paso es dejarlas fermentar durante un par de días, de manera que esas ramas que son de color verdoso acaben adquiriendo un tono rojizo, que es el que caracteriza a esta infusión. Es por este proceso de fermentación por el cual el sabor del té se vuelve tan característico. Es pues todo este proceso el que hace que el consumo de té rooibos ayude a nuestro hígado y mejore nuestra salud.
¿Por qué motivo el té rooibos es bueno para el hígado?
Para comprobar qué beneficios tiene el té rooibos sobre el hígado hay que tener en cuenta que siempre hay que consultar a un especialista o médico si su consumo es correcto o no. Es decir, hay que asegurarse que su consumo siempre sea positivo.
La razón por la que el té rooibos actúa como un excelente proyector del hígado se encuentra precisamente en sus propiedades antioxidantes. ¿Por qué? Porque estas propiedades logran activar las enzimas AMPK que previenen el conocido síndrome del hígado graso y el desarrollo de otros trastornos metabólicos. Además, algunos estudios han demostrado que el consumo diario de té rooibos es bueno para el hígado porque puede ayudar a depurarlo y a desintoxicarlo.
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Al mismo tiempo, el té rooibos es adecuado para el hígado porque también ayuda a combatir otros trastornos metabólicos en los que el hígado puede intervenir. Principalmente hablamos de cómo puede reforzar el tejido muscular, ayudándonos al mismo tiempo a absorber mucho mejor la glucosa en nuestra sangre. Tanto es así que este tipo de té armoniza nuestra circulación sanguínea.
Tampoco podemos dejar a un lado el poder antioxidante del té rooibos. Y es que una infusión de té rooibos es buena para el hígado porque ayuda a actuar en contra de los radicales libres, evitando así su inflamación o cualquier otro tipo de irritación.
Otros tés e infusiones que son buenos para el hígado
El té de rooibos no es un té rojo, aunque lo pudiera parecer por su aspecto. De hecho el té rojo y el rooibos no pertenecen a la familia. El té rooibos es de otra familia diferente, que es la de las leguminosas, como la alfalfa o la retama. Tiene un sabor peculiar, con matices de madera y fruta, e incluso muchos destacan notas achocolatadas. Para adquirir té e infusiones de calidad, que se hayan elaborado respetando todo los procesos, es mejor acudir a tiendas de confianza, de esta manera uno se asegurará que se está comprando un producto que posee todas las propiedades.
El caso es que el té rojo es bueno para el hígado graso porque al igual que el té rooibos nos ayuda con el procesado de las grasas y cuando se toma actúa en favor de su correcto funcionamiento.